Brindamos a nuestras novias un servicio de vestido de novia ultra personalizado, diseñado desde cero. Este servicio consta de cuatro pruebas fundamentales:
• Prueba 1: Durante esta cita, la novia se probará una toile, una prenda de tejido liso diseñada específicamente para definir y ajustar la silueta deseada del futuro vestido. Se abordarán aspectos como el escote, la espalda, los tirantes y otros detalles relacionados con la forma del vestido. Además, se tomarán las medidas del cuerpo que permitirá realizar un molde preciso del vestido y confeccicxonar el forro utilizando telas nobles para la próxima cita.
• Prueba 2: El forro y la elección del encaje: Se selecciona el forro adecuado para proporcionar estructura y comodidad al vestido, además de elegir el encaje que complementará el diseño.
• Prueba 3: Embolsado y montado del encaje: Se aplican técnicas de embolsado para un acabado limpio y profesional, y se monta cuidadosamente el encaje en el vestido.
• Prueba 4: Pre-entrega: Se realiza una revisión detallada del vestido para realizar ajustes finales y garantizar que cumpla con las expectativas de la novia antes de la entrega final.
• Entrega del Vestido: Durante esta cita, se entrega el vestido finalizado a la novia.
El proceso completo de confección de un vestido de novia a medida incluye cuatro pruebas, con la posibilidad de que la pre-entrega se convierta en la entrega final si el vestido no requiere ajustes adicionales. Cada prueba tiene una duración aproximada de una hora y se programa según la disponibilidad de la novia y de la empresa. Para facilitar el proceso, especialmente para las novias que residen fuera de la región, se ofrece un proceso exprés que agrupa dos citas en un mismo día, reduciendo así la cantidad de viajes necesarios. Con el proceso exprés, se requieren solo tres viajes en lugar de cinco, lo que optimiza el tiempo y los recursos para todas las partes involucradas.